lunes, 28 de enero de 2008

Felicidad

Un largo tiempo sin escribir, un largo tiempo sin sentir eso que me taladraba el alma y la llevaba a la putrefaccion lentamente, que me envenenaba mientras pasaban los dias.
Y hoy aqui me siento, nuevamente delante de la máquina que tantas veces recibió mis confesiones para hacer una nueva declaración, el alma me ha vuelto al cuerpo y se ha ido el cianuro que me atosigaba.
He charlado con mi confidente, es cierto que cuando uno es feliz, cuando no hay una pizca de dolor latente en el alma, la inspiracion se ve cortada, escondida. La felicidad no es algo que nos pese, que necesitemos quitar de adentro, sin embargo ¡que lindo es poder plasmar una sonrisa en una hoja!.
No hablaré de mi felicidad hoy, porque puede ser tan efímera como el último respiro, es cierto tambien que la felicidad nunca es suficiente, es una droga es una cosa extraña, adictiva y pasajera.
Vale la pena quizás aprovechar este momento de corta inspiracion para dejar plasmado que en algun momento fui feliz, que en algun instante residió en mi cuerpo ese extasis, esas cosquillas en el estómago. Después de mucho tiempo de pausar mi corazón, de dejarlo en stand by, encerrado e inaccesible, ha sido alcanzado.
Hoy revivieron mis ganas de escribir, de relatar, de plasmar, la poesía salió de su mazmorra, del subsuelo y emergió violentamente. Catarata de emociones que no se como controlar, por lo pronto aqui estoy poniendo punto final que es en realidad suspensivo a este sentimiento que hoy me llena.