entre los mosquitos me arrancaba el cabello
uno a uno apoye sobre tu marmol
frio, triste, solitario entre la grama ya crecida
me arriesgue a cortarme con las espinas y te deje dos rosas
a florecer
pimpollos
como me dejaste vos, lista para crecer y salir adelante
por mi cuenta.
arranque dos hojas que atesoro
una tuya
una de tu progenitora
y las guarde en mi como parte suya
les hable como no habia hecho antes
me sente entre ambas a merced de los vientos cambiantes y del frio
(aqui tema recurrente)
tan frio fue, estar junto a ustedes sin sentir nada
sin embargo se me calento el alma.
Siguen, aun sin estar, dandome paz
tanta paz
dos rosas a cada una.
mis mujeres, mis modelos, mis otros yo.
una junto a la otra
descansando
eternas
inborrables
inviolables
pasaran por el tiempo y veran todo, sin envejecer mas de la cuenta
es que en el olimpo residen
y madre me miras.
si que me miras y me dejas caer y tropezarme y levantarme y volver a caer.
porque asi eres orgullo
y ese orgullo me da paz
y ese calor que recibo
cuando me siento entre sus marmoles frios y estaticos.
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